Medicaid, creado hace 60 años durante la presidencia de Lyndon B. Johnson, fue diseñado para garantizar el acceso a atención médica a los sectores más vulnerables de la población estadounidense. Actualmente, el programa cubre a 73 millones de personas, incluyendo adultos y niños de bajos ingresos, así como algunos adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con discapacidades. No obstante, el futuro de Medicaid podría verse amenazado por los recortes presupuestarios propuestos.
Medicaid y su rol en el sistema de salud estadounidense
Medicaid es una piedra angular del sistema de salud pública en Estados Unidos, con financiamiento compartido entre los estados y el gobierno federal. Este programa proporciona cobertura médica a aproximadamente uno de cada cinco estadounidenses, lo que lo convierte en un componente crucial del bienestar social y sanitario. Sin embargo, con el reciente plan presupuestario aprobado por la Cámara de Representantes, liderada por los republicanos, el futuro de Medicaid podría estar en peligro. El plan contempla una reducción del gasto federal de hasta 2 billones de dólares en la próxima década, lo que podría implicar recortes significativos a programas de salud como Medicaid.
La expansión de Medicaid bajo la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA)
La Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA), también conocida como Obamacare, permitió que 20 millones de personas adicionales accedieran a cobertura médica a través de Medicaid. Esta expansión fue fundamental para reducir la cantidad de personas sin seguro médico en Estados Unidos. La mayoría de los estados adoptaron esta expansión, lo que permitió a los adultos en edad laboral con ingresos bajos calificar para recibir beneficios.

EFE/Rodrigo Jiménez
El impacto de los recortes
Si los recortes presupuestarios propuestos se llevan a cabo, es probable que afecten principalmente a los beneficiarios de la expansión de Medicaid bajo la ACA. El gobierno federal cubre el 90% de los costos de la atención médica para estos beneficiarios, lo que significa que los estados podrían enfrentar dificultades para mantener los niveles de cobertura. Además, diez estados, entre ellos Texas y Florida, no participaron en la expansión de Medicaid, lo que deja a muchos residentes sin acceso a este programa.
En términos generales, los beneficiarios no suelen pagar por los servicios médicos que reciben, aunque en algunos casos se les exige contribuir con pequeñas cantidades. La ley federal establece que estos costos deben mantenerse al mínimo para garantizar que el programa siga siendo accesible a quienes más lo necesitan.
Su impacto en la economía del sector salud
Además de su importancia para los individuos que dependen de él, Medicaid desempeña un papel crucial en la economía del sector salud. Muchos hospitales dependen en gran medida de los ingresos provenientes de Medicaid, y una reducción en el financiamiento podría comprometer su estabilidad financiera. Esto podría afectar directamente la calidad y la disponibilidad de los servicios médicos en algunas áreas.
La relación entre Medicaid y el empleo en el sector salud
La expansión bajo la ACA también generó un aumento significativo en el empleo dentro del sector salud. Recortes podrían poner en riesgo miles de puestos de trabajo, afectando a médicos, enfermeras y otros trabajadores esenciales. Este impacto podría extenderse a muchas comunidades que dependen de la industria de la salud como una fuente importante de empleo.

Imagen de archivo de dos profesionales de la odontología durante una consulta. EFE/EPA/Guillaume Horcajuelo
¿Cómo afectarían los recortes a los no beneficiarios?
Aunque los recortes presupuestarios podrían no tener un impacto inmediato sobre quienes no están inscritos en Medicaid, es importante destacar que muchos estadounidenses recurren a este programa en momentos de necesidad, como cuando pierden su empleo o necesitan atención en un hogar de ancianos sin los recursos suficientes para cubrir los costos. Además, los jóvenes adultos, quienes suelen calificar para Medicaid antes de obtener empleos que ofrezcan seguros médicos, también podrían verse afectados.
Aunque los recortes a Medicaid no afectarían directamente a quienes tienen seguros privados bajo la ACA, podrían tener un impacto indirecto. Esto se debe a que Medicaid y los subsidios para seguros privados están interrelacionados. Cualquier cambio en uno de estos programas podría alterar el equilibrio del sistema de salud y afectar la cobertura de seguros en general.
El debate sobre los recortes
Medicaid ha sido objeto de debates políticos desde su creación. Su elevado costo lo convierte en un blanco recurrente en discusiones sobre recortes presupuestarios. La resolución aprobada por la Cámara de Representantes, que también incluye recortes fiscales, refleja las prioridades de los legisladores republicanos, quienes buscan reducir el gasto público mientras extienden las reducciones de impuestos implementadas en 2017.